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Máximo Kinast Avilés

Elucubraciones

CARTA DEL JEFE SEATLE AL PRESIDENTE DE USA

TEXTO DEL JEFE INDIO SEATTLE

Chief Seattle. Jefe indio. 1854.

AL PRESIDENTE DE EEUU.


 

 

 

 

Chief Seattle. Jefe indio. 1854.

( Carta de Seattle, jefe de la tribu Suwamish al presidente de los Estados Unidos, Mr. Franklin Pierce, el año 1855, como respuesta a su oferta de compra de las tierras Suwamish.

 

)

Estatua de Seattle en el Tilikum Place, dowtown Seattle. De James Wehn

 

indio2.jpg (1345 bytes) El gran caudillo de Washington ha ordenado hacernos saber que nos quiere comprar las tierras. El gran caudillo nos ha mandado también palabras de amistad y de buena voluntad. Apreciamos mucho esta delicadeza porque conocemos la poca falta que le hace nuestra amistad. Queremos considerar su ofrecimiento, pues sabemos que si no lo hiciéramos, pueden venir los hombres de piel blanca a tomarnos las tierras con sus armas de fuego. Que el gran caudillo de Washington confíe en la palabra del líder Seattle con la misma certidumbre que espera la vuelta de las estaciones. Mis palabras son inmutables como estrellas.

Grabados de tiendas indias.

indio2.jpg (1345 bytes) ¿Como podéis comprar o vender el cielo o el calor de la tierra? Se nos hace extraña esta idea. No son nuestros el frescor del aire ni los reflejos del agua. ¿Cómo podrían ser comprados? Lo decidiremos más adelante. Tendríais que saber que mi pueblo tiene por sagrado cada rincón de esta tierra. La hoja resplandeciente; la arenosa playa; la niebla dentro del bosque; el claro en la arboleda y el zumbido del insecto son experiencias sagradas y memorias de mi pueblo. La sabia que sube por los árboles lleva recuerdos del hombre de piel roja.

Tumba india. Lugares sagrados.

indio2.jpg (1345 bytes) Los muertos del hombre de piel blanca olvidan su tierra cuando empiezan el viaje en medio de las estrellas. Los nuestros nunca se alejan de la tierra, que es la madre. Somos un pedazo de esta tierra; estamos hechos de una parte de ella. La flor perfumada, el ciervo, el caballo, el águila majestuosa: todos son nuestros hermanos. Las rocas de las cumbres, el jugo de la hierba fresca, la calor de la piel del potro: todo pertenece a nuestra familia.

South MacMillan rivers.

indio2.jpg (1345 bytes) Por esto, cuando el gran caudillo de Washington manda decirnos que nos quiere comprar las tierras es demasiado lo que nos pide. El gran caudillo quiere darnos un lugar para que vivamos todos juntos. El nos hará de padre y nosotros seremos sus hijos. Hemos de meditar su ofrecimiento. No se nos presenta nada fácil ya que las tierras son sagradas. El agua de nuestros ríos y pantanos no es sólo agua, sino la sangre de nuestros antepasados. Si os vendiésemos las tierras, haría falta que recordaseis que son sagradas y lo tendríais que enseñar a vuestros hijos y que los reflejos misteriosos de las aguas claras de los lagos narran hechos de la vida de mi pueblo. El murmullo del agua es la voz del padre de mi padre.

The Snake River area.

indio2.jpg (1345 bytes) Los ríos son hermanos nuestros, porque nos libran de la sed. Los ríos arrastran nuestras canoas y nos dan sus peces. Si os vendiésemos las tierras, tendríais que recordar y enseñar a vuestros hijos que los ríos son hermanos nuestros y también vuestros. Tendríais que tratar a los ríos con el corazón.

Fotografía del Gran Jefe Seattle.

indio2.jpg (1345 bytes) Sabemos bien que el hombre de piel blanca no puede entender nuestra manera de ser. Tanto le importa un trozo de tierra que otro, porque es como un extraño que llega de noche a arrancar de la tierra todo lo que necesita. No ve la tierra con una hermana, sino más bien como una enemiga. Cuando la ha hecho suya, la menosprecia y sigue andando. Deja atrás las sepulturas de sus padres y no parece que eso le duela. No le duele desposeer la tierra de sus hijos. Olvida la tumba de su padre y los derechos de sus hijos. Trata a la madre tierra y al hermano cielo como si fueran cosas que se compran y se venden; como si fuesen animales o collares. Su hambre insaciable devorará la tierra y detrás suyo dejará tan sólo un desierto.

indio2.jpg (1345 bytes) No lo puedo comprender. Nosotros somos de una manera de ser muy diferente. Vuestras ciudades hacen daño a los ojos del hombre de piel roja. Tal vez sea porque el hombre de piel roja es salvaje y no puede entender las cosas. No hay ningún lugar tranquilo en las ciudades del hombre de piel blanca; ningún lugar donde se pueda escuchar en la primavera el despliegue de las hojas, o movimiento de las alas de un insecto. Tal vez me lo parece a mi porque soy un salvaje y no comprendo bien las cosas. El ruido de la ciudad es un insulto para el oído. Y yo me pregunto: ¿qué tipo de vida tiene el hombre cuando no es capaz de escuchar el grito solitario de una garza o la discusión nocturna de las ranas alrededor del charco? Soy un hombre de piel roja y no puedo entender. A los indios nos deleita el ligero murmullo del viento fregando la cara del lago y su olor después de la lluvia del mediodía, con su peculiar fragancia.

Fotografía del Gran Jefe Seattle.

indio2.jpg (1345 bytes) El hombre de piel roja es conocedor del valor inapreciable del aire ya que todas las cosas respiran su aliento: el animal, el árbol, el hombre. Pero parece que el hombre de piel blanca no sienta el aire que respira. Como un hombre que hace días que agoniza, no es capaz de sentir la peste. Si os vendiésemos las tierras, tendríais que dejarlas en paz y que continuasen sagradas para que fuesen un lugar en el que hasta el hombre de piel blanca pudiese saborear el viento endulzado por las flores de la pradera.

The Snake River area.

indio2.jpg (1345 bytes) Queremos considerar vuestra oferta de comprarnos las tierras. Si decidiéramos aceptarlo tendré que poneros una condición: que el hombre de piel blanca mire a los animales de esta tierra como hermanos.

Fotografía del Gran Jefe Seattle.

indio2.jpg (1345 bytes) Soy salvaje, pero me parece que tiene que ser así. He visto búfalos a miles pudriéndose abandonados en las praderas; el hombre de piel blanca les disparaba desde el caballo de fuego sin ni tan sólo pararlo. Yo soy salvaje y no entiendo porqué el caballo de fuego vale más que el búfalo, ya que nosotros lo matamos sólo a cambio de nuestra propia vida. ¿Qué puede ser del hombre sin animales? Si todos los animales desapareciesen , el hombre tendría que morir con gran soledad de espíritu. Porque todo lo que les pasa a los animales, bien pronto le pasa también al hombre. Todas las cosas están ligadas entre sí.

indio2.jpg (1345 bytes) Haría falta que enseñaseis a vuestros hijos que el suelo que pisan son las cenizas de los abuelos. Respetarán la tierra si les deciís que está llena de vida de los antepasados. Hace falta que vuestros hijos lo sepan, igual que los nuestros, que la tierra es la madre de todos nosotros. Que cualquier estrago causado a la tierra lo sufren sus hijos. El hombre que escupe a tierra, a sí mismo se está escupiendo.

Niños indios

indio2.jpg (1345 bytes) De una cosa estamos seguros: la tierra no pertenece al hombre; es el hombre el que pertenece a la tierra. El hombre no ha tejido la red que es la vida, sólo es un hijo. El sufrimiento de la tierra se convierte a la fuerza en sufrimiento para sus hijos. Estamos seguros de esto. Todas las cosas están ligadas como la sangre de una misma familia.

South MacMillan rivers.

indio2.jpg (1345 bytes) Hasta el hombre de piel blanca, que tiene amistad con Dios y se pasea y le habla, no puede evitar este destino nuestro común. Tal vez sea cierto que somos hermanos. Ya lo veremos. Sabemos una cosa que tal vez descubriréis vosotros más adelante: que nuestro Dios es el mismo que el vuestro. Os pensáis que tal vez tenéis poder por encima de Él y al mismo tiempo lo queréis tener sobre todas las tierras, pero no lo podéis tener. El Dios de todos los hombres se compadece igual de los de piel blanca que de los de piel roja. Esta tierra es apreciada por su creador y estropearla sería una grave afrenta. Los hombres de piel blanca también sucumbirán y tal vez antes que el resto de tribus. Si ensuciáis vuestra cama, cualquier noche moriréis sofocados por vuestros propios delitos. Pero veréis la luz cuando llegue la hora final y comprenderéis que Dios os condujo a estas tierras y os permitió su dominio y la dominación del hombre de piel roja con algún propósito especial. Este destino es en verdad un misterio, porque no podemos comprender que pasará cuando los búfalos se hayan extinguido; cuando los caballos hayan perdido su libertad; cuando no quede ningún rincón del bosque sin el olor del hombre y cuando por encima de las verdes colinas nuestra mirada encuentre por todas partes las telarañas de hilos de hierro que llevan vuestra voz.

Fotografía del Gran Jefe Seattle.

indio2.jpg (1345 bytes) ¿ Dónde está el bosque espeso? Desapareció. ¿Dónde está el águila? Desapareció. ¡Así se acaba la vida y empezamos a sobrevivir! 

Abuela india, con niño en brazos. Grabado indio.

 

Grabados de tiendas indias.

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UN MENSAJE DESDE BRASIL PARA COMPARTIR

Aproveito o gancho de passar a você um video que adoro, chamado
Dancem macacos, dancem!
http://video.google.com/videoplay?docid=-2219261287903697793

Pra avisar que estou de blog novo:
http://tzatziki.wordpress.com/

Nele vou falar de amenidades...
Espero você por lá, ok?

há braços,

Mauricio Otero

Fuente: http://www.australosorno.cl Sección: Opinión - Fecha: 23/08/06

-¿Cómo? -Por qué? -Cuándo, sí, pero, -Quién, -Por qué, -¿ahora?, No sé...¿Importa? -Tal vez, cuál vez, -estás soñando? No me acuerdo? ¿Dónde estás? ¿Vendrá? ¿Quién? Cualquier, ¿cualquier? Para qué?...Ah!...

Y si lo intentáramos...? -No hay nada que hacer- Erramos? Somos? ¿Cómo? Ya... vino... Volverá?... No me importa... Y si viene- Para qué? Seremos cuántos, por dónde, acaso, comes, qué, cómo, no sé. Entonces?...

"El punto es, ¿Quién eres tú? No por qué o cómo, ni siquiera qué. Tal vez puedo ver qué, con bastante nitidez. ¿Pero quién eres? No sirve de nada saber. Eso no tiene nada que ver conmigo. No es cosa mía. A veces creo que percibo algo de lo que eres, pero es nada más que un accidente." -Eso. -Quizás tuviste una visión. -Una visión. -Una alucinación. -Una ilusión. "Dependemos de estos accidentes, estos accidentes inventados para continuar. No tiene importancia entonces que sea conspiración o alucinación. Pero cómo vamos, -A dónde? ¿Cómo? Por qué? Uno es cero. Eres sincero? Qué? "¿Vamos?"

Esta glosa de "Esperando a Godot", de Samuel Beckett y 'restos' de "Los enanos", de Harold Pinter, se han podido unir gracias al cordón invisible del teatro del absurdo.

Decimos que algo es un absurdo cuando no tiene sentido, cuando el sin sentido, de la vida, de las cosas, del tiempo, del lugar, de la acción, del pensamiento, ocupan nuestra inteligencia y no hayamos la lógica, las coordenadas que lo expliquen a nuestro sano entendimiento. Pero acaso, desde la antigüedad, los hombres hemos esperado a ese Godot, que no sabemos qué es, si es algo, o como los enanos de Pinter, finalmente descubrimos que somos bichos que se alimentan de la carroña que dejan otros, no importa quiénes ni por qué, sólo que ese alimento ya no está más. Alimento para el cuerpo o el alma. Hoy somos un 'esclavo técnico', como señaló en "La hora veinticinco", Virgil Gheorghiu. Todos pasamos la vida esperando un mensaje, cuál, no importa, es una ocupación cuando no tenemos nada que hacer. Ionesco planteó que estamos solos en el mundo moderno. O somos rinocerontes, paquidermos pesados. Obesos.

La gente se echa al consumo y se harta, pero qué sentido tiene ir tras las cosas, los desesos inventados, la 'realización' artificial mediante el Vacío. No hay espíritu, por pobre que sea que no piense que se ha perdido el horizonte, las ideas ya parecen no bastar, ni la moral, ni la ética. Queremos olvidar, ¿qué y por qué? La gran orgía es general. Nada importa, sólo olvidar. Olvidar que somos hombres y decir con Terencio "soy humano y todo lo humano me concierne".

ENTROPIA Y ECONOMIA

(Escrito en Barcelona entre 1989 y 1991 por Máximo Kinast)

Cuando era muy niño pude aprender que haciendo un castillo en la arena también hacía un hoyo. Del hoyo sacaba la arena necesaria para hacer el castillo. También aprendí que el hoyo solo podía hacerlo hasta donde alcanzaba mi brazo y que más profundo era casi imposible y el esfuerzo no justificaba los resultados.

En esa época no sabía que se trataba de la segunda ley de la termodinámica, la ley que dice que la entropía aumenta en todo sistema cerrado. Tampoco sabía que la causa de la riqueza de los países ricos era la pobreza de los países pobres. O dicho de otra forma, la disminución de la entropía en los países ricos se debe a que aumenta en los países pobres.

La entropía es la medida del desorden. También se enseña que es la medida del tiempo y de que transcurre en un sentido: siempre aumenta. Los físicos explican muy bien estas cosas, pero es difícil para nosotros entenderles, aunque hay algún ejemplo que puede ayudarnos: La electricidad producida en una turbina por una caída de agua no es suficiente para hacer subir el agua que la produjo hasta adonde estaba esa misma agua. ¿Por qué? No lo sé, pero es así.

La energía pasa de una forma más aprovechable a una menos aprovechable. Es más fácil sacar la pasta dental del tubo que volver a meterla.

Hay algunas frases muy divertidas (Leyes de Murphy) que se refieren a la burocracia y a las empresas, un tanto en broma, pero que son un fiel reflejo de la segunda ley de la termodinámica. Por ejemplo:

"El desorden aumenta hasta llenar el espacio disponible."
"Antes de hacer alguna cosa siempre hay que hacer otra."
"Nada es tan fácil como parece."
"Si una cosa se manipula el tiempo suficiente, se romperá."

No pretendo ser derrotista o pesimista, ni siquiera pasar por gracioso. Se trata de una realidad científica que la explica el premio Nobel belga Ilya Prigogine en su célebre fórmula:

dS = dS’+ dS"

En la que S es una medida de entropía y dS es el cambio entrópico.

El cambio se produce en uno u otro sentido según cual de las dos cantidades es mayor:

dS’ = energía disipada en el sistema,

dS" = energía importada del exterior.

Si la primera es mayor el sistema gana en entropía (aumenta el desorden y la energía inutilizable), en cambio si es mayor la segunda, disminuye la entropía.

Un sistema se alimenta de neg-entropía o entropía negativa a expensas de aumentar la entropía de otro sistema.

Por ejemplo, en un sistema ecológico natural, como la Tierra de hace algunos siglos, las dos cantidades se equilibraban y aumenta la entropía del sol.

Otro ejemplo, la riqueza de las grandes naciones se produjo como consecuencia de la rentabilidad de las colonias. O lo que es lo mismo, la entropía de la metrópoli disminuye en relación directa con el aumento de entropía en la colonia.

El costo de mantener ejércitos coloniales era inferior a los beneficios que producían las colonias.
Estos beneficios se producían de dos formas:

a) Obligándoles a comprar productos de la metrópoli, y

b) fijando los precios y cupos de sus exportaciones y limitándolas exclusivamente a la metrópoli.

En este contexto nunca existió una moral ni una religión que tuviese importancia. Cuando el coste de mantener los ejércitos de ocupación fue superior a los beneficios que la Colonia proporcionaba a la Metrópoli … las Colonias estuvieron maduras para acceder a su Independencia.

No hace mucho, en 1900 las naciones más poderosas del mundo hicieron la guerra a China para obligarla a producir y consumir opio. Se la conoce como la guerra de los Boxer y también por la película "45 días en Pekín", pero poco se sabe de la verdadera causa que defendían entre otros Estados Unidos, Rusia, Japón, Francia, Italia, Gran Bretaña, España y no se quien más.

Tampoco se sabe mucho de los castigos que se aplicaban en la India de los ingleses a mujeres a las que cortaban los pulgares para que no pudieran tejer y competir con la industria de Liverpool.

Quizás por estas razones Mahatma Gandhi insistía en que la libertad de la India se lograría con no comprar productos ingleses ni europeos, especialmente textiles, y propiciaba que todas y cada una de las mujeres hindúes utilizara una pequeña rueca o telar primitivo y él mismo daba el ejemplo tejiendo cada día en medio de sus oraciones y su lucha por la independencia por medios no violentos.

Pensamos que por este camino esta la solución a la trágica situación de los países pobres. En la utilización de energías alternativas, en el salto de la etapa industrial, por sobre la etapa industrial para ir directamente hacia una economía de Tercera Ola* desde una economía de subsistencia.

* Alvin Toffler Ob. citada.

DETERMINISMO Y ALBEDRIO

(Escrito en Barcelona entre 1989 y 1991 por Máximo Kinast)

Hay una larga polémica en torno a estos dos temas, que no ha sido superada, aunque parece haber sido olvidada. Para entendernos, Determinismo es la creencia de que "todo está escrito", por decirlo en forma de metáfora.

El Determinismo lleva a la Fatalidad, a pensar que nadie puede escapar a su destino, que no somos libres para tomar una decisión, porque ésta nos viene condicionada, "determinada" por causas que escapan a nuestra voluntad. Muchos millones de seres humanos creen sinceramente en el Determinismo, como los musulmanes en todas sus variantes.

Albedrío es la facultad de obrar a su antojo. Hacer lo que le pete, dentro de lo que cabe, se diría en España. Albedrío es la capacidad, facultad o potestad de elegir libremente. Los cristianos creen firmemente en esta idea. Para ellos, Dios conoce el Presente, el Pasado y el Futuro, pero eso no impide que "el hombre" (curioso, pero nunca dicen el ser humano) pueda libremente salvarse o condenarse.

Si pensamos un poquito en el tema, llegamos a la conclusión de que ambos términos son excluyentes y por lo tanto:

a) Uno de los dos es verdadero y el otro es falso, o bien,
b) Los dos son falsos, porque ...
c) Los dos no pueden ser verdaderos.

Pamplinas! El problema ha sido planteado como una dicotomía (o sí o no), lo que casi siempre suele ser un error.

Si pensamos seriamente veremos que son términos antagónicos pero no necesariamente excluyentes. Usted puede usar las palabras frío y calor y mirar de nuevo el problema. Se puede tener mucho frío y un momento después tener calor, incluso es posible sentir frío en una parte del cuerpo y calor en otras, como si se le ocurre en una tarde de verano meter los pies en un cubo con hielo.

Hay momentos en que tendrá más albedrío, o momentos en que estará más determinado, pero siempre tendrá usted una carga de determinismo y una de albedrío. Son antagónicas, pero coexisten en cada ser humano y en cada objeto o cosa de este universo.

Las leyes de la Física son de tipo Determinista, como por ejemplo la Segunda Ley de la Termodinámica, que dice que en un sistema cerrado la entropía aumenta, (excepto si disminuye a expensas de otro sistema, con lo cual el primero deja de ser cerrado). Hagamos lo que hagamos, la entropía irá en aumento.

Por otra parte, parece ser que las leyes del Azar pertenecen al Albedrío, lo que nos llevaría a suponer que Dios (de existir) juega a los dados, porque, naturalmente, el Albedrío propio del azar no es causado por la voluntad de un ser humano. No creo en los Positivistas que suponen que dadas todas las variables, factores, etc., cualquier hecho será exactamente predecible.

Es cierto que podemos prever que un cuerpo al que aplicamos calor se dilatará, e incluso, con bastante aproximación (con un margen de error ínfimo) podemos predecir cuanto se dilatará con cada dosis de calor. Es cierto que son muchos los hechos que podemos prever y extraer conclusiones derivadas de la experimentación y de la observación repetida... pero no podemos saber que número de la lotería saldrá premiado el sábado próximo. Y es este último tipo de hechos, propios del azar, los que supongo regidos por el Albedrío. Es posible que el Albedrío también tenga algo que decir sobre ese margen de error ínfimo que mencionábamos... o sobre el Principio de Incertidumbre.

Si recordamos el concepto de Tiempo y el gráfico del cono de posibles futuros lo comprenderemos mejor. Hay factores determinantes, como la trayectoria del Pasado. Mientras más se parezca a una recta, más posibilidades tiene de continuar siéndolo. Quiero decir que de alguna forma existe una inercia que te lleva en la dirección que traías. Dentro de este factor podemos citar la alimentación que has recibido. Si eres europeo te puedes reír y pensar que escribo una tontería, pero si eres africano o sudamericano pobre y durante toda tu vida, cada día has comido menos calorías que las necesarias, tu albedrío será muy pequeño, porque tu cerebro estará dañado irreparablemente y tu estómago te empujará junto con los demás elementos de la pobreza.

Otro factor determinante es la velocidad del Pasado. Por la misma razón de inercia que hemos comentado, si vienes acelerado te será más difícil frenar para tomar una decisión o si ésta está preestablecida te llevará más directamente a su consecución.

Existen factores determinantes externos, por darle un nombre pomposo a la voluntad de los demás y al cono de posibilidades de las cosas. Quiero decir que si haces un cono con un diario y otro cono con cartón y haces chocar los dos, el de papel se abollará.

En otras palabras, si hay sólo un puesto de trabajo y diez candidatos a ocuparlo, ese puesto está en el cono de posibles futuros de todos los candidatos hasta el momento en que uno de ellos lo ocupa. A partir de ese momento pasa a estar en el cono de futuros aleatorios para cada uno de los nueve derrotados (siempre puede suceder que el elegido renuncie o se enferme o se muera).

Otro ejemplo es el caso de un accidente por fallos mecánicos. En el cono de futuros posibles de una cosa está el fallar por desgaste y romperse, y en el de una persona está que le caiga en la cabeza, en cuyo caso poco o nada tiene que hacer el libre albedrío.

También existen limitaciones al albedrío por pérdida de la libertad. En el cono de futuros posibles de seres poco humanos está la posibilidad de capturar a otros seres humanos y someterlos a su voluntad (antes se llamaba esclavitud, hoy se dice "missing"), y vejarlos y torturarlos y quebrantar su voluntad. He conocido muchas personas que han sufrido esa experiencia y puedo asegurar que algunos se quiebran definitivamente y otros, en el fondo de su ser eligen. Son los que siguieron ejerciendo su libre albedrío aún en los peores momentos.

El sentido de la propia identidad, exagerado hasta el orgullo o la vanidad, es una forma de expresar la búsqueda de Albedrío. La posición social, el poder, la cultura, pero sobre todo el dinero, son los medios más buscados para alcanzar mayor Albedrío.

En la práctica todas las exageraciones se transforman en factores de Determinismo. En otro extremo de la escala están los anacoretas, hippies y demás yerbas similares, con una fuerte dosis de determinismo encima. EL Albedrío se tiene sólo cuando se sabe que se tiene. Cuando un ser humano sabe que puede elegir entre ser o no ser. El Albedrío no se obtiene con actitudes ni con demostraciones. Se obtiene mediante el conocimiento de sí mismo... y es bastante difícil hacerlo.

PODER Y DIFERENCIACIÓN

(Escrito en Barcelona entre 1989 y 1991 por Máximo Kinast)

No estoy en contra de las más sagradas aspiraciones de la humanidad. Si fuese así no escribiría una línea. Pero la verdad exige varias páginas para ver la luz.

Pienso que si aclaramos un poco el panorama estaremos más cerca de alcanzar un cierto grado de igualdad, aunque estoy seguro que la igualdad total, absoluta es un mito y seguirá siéndolo, porque está en la naturaleza misma de los seres humanos ser diferentes entre sí.

Hay diferencias notables que saltan a la vista y, por lo tanto, no necesitan análisis ni defensa, son simplemente diferencias naturales, biológicas como el sexo, el color de la piel, del pelo, de los ojos, el tipo sanguíneo, la estatura, la contextura, el desarrollo del cerebro o de los músculos, etc.

Hay diferencias perceptibles debidas a la cultura a que se pertenece y que nos hace ver como naturales, humanas las nuestras y absurdas, peligrosas o indignantes las ajenas.

Estas diferencias son causadas por la educación y aprendidas por imitación. Sugerimos leer "Al Filo del Futuro" de Howard Fast).

Son creencias defendidas con todas nuestras fuerzas como si fuesen verdades superiores, en casos extremos consideradas divinas, revelaciones de una divinidad superior, en otras respetadas por ser obra de nuestros antepasados.

Nunca son analizadas ni cuestionadas, aunque los factores externos, nuestro entorno sufra cambios.

A veces, las costumbres quedan obsoletas y se pierden en el olvido o pasan a formar parte del folklore antes de perderse para siempre.

Una parte de la sociedad, la parte marginada, suele oponerse con violencia (la mayoría de las veces) o pasivamente a algunas costumbres que la afectan directamente; pero lamentablemente es también esta parte menos culta, con menores conocimientos, la que defiende con mayor fanatismo y fuerza la permanencia de costumbres nefastas, inhumanas o inadecuadas al buen desarrollo de una sociedad libre y justa.

Sucede así porque no tienen acceso a la cultura y sus conocimientos suelen ser prejuicios que configuran su personalidad y se confunden con valores.
Posiblemente existen muchas otras diferencias entre los seres humanos, pero hay dos que considero fundamentales:

El Grado de Poder y el Grado de Diferenciación

Se trata, por definición, de diferencias cuantitativas aunque su cantidad sea difícilmente mensurable.

El Grado de Poder es una importante diferencia natural entre los seres humanos, que resulta muy difícil captar.

Podemos intentar simplificar diciendo que hay seres humanos Alfa, seres Beta, Gama, etc. Pienso en un Poder natural que emana de cada ser humano estableciendo una jerarquía. Tanto en grupos de humanos de condición muy humilde, como muy alta, siempre hay alguno en cada grupo al que los demás consideran su líder.

En las empresas se hacen organigramas, basados en la posición de cada persona en relación a su puesto de trabajo y al mando u obediencia referido a los demás; pero es muy raro que se haga un sociograma que revele la posición de cada uno dentro de la Empresa basado únicamente en su prestigio natural, en su Poder personal sobre los demás.

Es muy posible que las habilidades naturales, en los tiempos primitivos, tales como la fuerza física o la facilidad de expresión, permitieran establecer jerarquías en las proto tribus de prehomínidos.

Hoy es posible que estas dotes naturales de poder afloren en casos de fuertes cambios, convulsiones sociales, como una guerra, una revolución o un terremoto. Pero en la vida social actual es casi imposible para un humano Alfa actuar como tal. Esto es porque el Poder se ha revestido de simbolismos, manifestaciones externas, casi siempre ajenas a la naturaleza verdadera del ser humano que lo ejerce.

Hay un mínimo de Poder basado en la fuerza o la destreza física y es el que tienen los grandes deportistas, los campeones olímpicos. Mayor lo tuvieron en la Grecia clásica. Hoy es casi un momento efímero de gloria. También existe este tipo de poder en los grupos marginales, especialmente en asociaciones rufianescas de corte delictivo, como suele ocurrir en los bajos fondos y en las cárceles.

Hay un Poder emanado de la actividad y posición social, como sucede con los profesionales, maestros, abogados, etc. Los médicos son un caso aparte dentro de este esquema. Su Poder ha evolucionado de la consideración y respeto al brujo de la tribu. En muchos casos este Poder deriva de la inteligencia y la formación cultural superior al vulgo.

Hay un Poder heredado por nacimiento dentro de una clase social o de una casta. Su base es puramente cultural y no tiene que tener necesariamente una base real. Al decir cultural me refiero a los usos y costumbres vigentes en un pueblo determinado.

Hay un poder adquirido por los años y respaldado por la cultura y por el respeto a la mayor experiencia de los mayores. Es un poder débil que necesita de un cierto grado de Poder natural para ser aceptado, o el apoyo de algún otro tipo de poder.

Hay muchas otras formas de Poder, como el que otorga el hábito o el uniforme, el que concede la jerarquía, o el Poder del que tiene Albedrío. Generalmente el dinero es fuente de Albedrío y por ende de Poder.

El Grado de Diferenciación no existía para nuestros primitivos antepasados porque vivían en directo contacto con la naturaleza. Más aún no eran diferentes a la naturaleza. Formaban parte de ella, eran parte del paisaje. Existía una ecología natural. Estaban integrados en un ecosistema. Aunque eran recolectores de frutas y hasta cazadores, ni su actividad social ni la individual alteraban la naturaleza.
No la transformaban aunque la usaran, como no la transforman los animales con su existencia.

Algún homínido o algunos en alguna parte o en varias en períodos que podemos considerar simultáneos, tomó conciencia de sí mismo y se diferenció de la naturaleza. En ese momento nació el primer ser humano. Al contemplar el entorno como algo ajeno a sí mismo dio inicio a la actividad transformadora de la naturaleza. Supongo que muy pausadamente, pero con una aceleración geométrica, hasta llegar a nuestros días en que todo lo que nos rodea ha sido modificado, adaptado a lo que pensamos y creemos que es bueno para nosotros.

Vivimos en la actualidad en una naturaleza artificial, fabricada por nosotros mismos, que corresponde a una imagen falseada del ser humano. Posiblemente la misma artificiosidad de la naturaleza en la que estamos inmersos sea causa y efecto acelerador de nuestra imagen errada sobre nuestra identidad. Una forma de locura colectiva con feed back. Es este grado de diferenciación de la naturaleza, esta capacidad de distinguirse del paisaje, es nuestra capacidad de entendernos a nosotros mismos, de librarnos de la percepción acostumbrada, de captar nuestra locura, lo que nos hace diferentes a los seres humanos entre sí. Hay algunos que siguen siendo paisaje, otros que se diferencian algo y los hay que ya no son paisaje.

LIBRES E IGUALES


(Escrito en Barcelona entre 1989 y 1991 por Máximo Kinast)  

 

 

"Los hombres nacen libres e iguales" Una hermosa frase, sin duda, pero falsa. Una aspiración de una parte de la humanidad. Una declaración de principios. En resumen, palabras. ¿Qué hay de verdad en estas palabras? Muy poco. Algunos hombres y casi ninguna mujer nacen libres. La mayoría, una inmensa mayoría no nacen libres aunque no sean esclavos.

Nacen pobres, paupérrimos, súbditos, minoras, dominados por prejuicios, ideologías, hábitos, costumbres, etc., condenados a vivir, crecer, educarse, reproducirse y morir dentro de un contexto cultural jerarquizado.

Y siempre son muchos más los que nacen en los escalones inferiores de la pirámide social, económica, cultural o política, conjugando la mayoría de las veces varios de estos factores limitadores de la libertad humana.

Siempre limitados por su condición inferior y sin posibilidad de cambiarla por su sólo esfuerzo.

Los casos escasos en que esto ocurre, como en las películas o en las novelas, reciben gran publicidad y difusión para justificar como verdad la falacia de que hemos nacido libres, cuando la realidad es que esos casos aislados son la excepción que confirma la regla.

La libertad es una consecuencia y una de sus causas podría ser la igualdad si existiera.

Pero la igualdad no existe entre los seres humanos. Quizás sí, sólo como una aspiración o ideal de justicia:

"Todos los hombres son iguales ante la ley".

Uno de los hermosos corolarios de la Democracia. Sabemos muy bien que no es así.

Para demostrarlo basta con analizar la aplicación de la pena de muerte en cualquier sociedad.

Siempre son mucho más numerosos los condenados a la pena capital que además de algún delito, verdadero o falso, son pobres, o tienen un color de piel distinto al de la mayoría que ha hecho las leyes, o pertenecen a una religión o partido político diferente, o practican una vida sexual perseguida, o cualquier otra razón o sinrazón, como ser civiles en un régimen militar.

En cambio los que pertenecen a la cúpula gobernante (salvo el caso de revoluciones triunfantes), los que son ricos o tienen poder, no suelen ser condenados a muerte.

Pero no es necesario debatir el tema de la pena de muerte para saber que no somos iguales ante la justicia. Cualquiera que haya tenido que acudir a los Tribunales en cualquier país del mundo sabe que lleva ventaja el que puede pagar un mejor abogado, el que tiene dinero o poder para hacerlo, y estas dos cosas van casi siempre juntas.

TIEMPO Y PARADOJAS

Escrito en Barcelona entre 1989 y 1991 por Máximo Kinast)

Toda acción o movimiento implica un tiempo.

Nuestro lenguaje esta impregnado de palabras que significan acción o movimiento: son los verbos, sin los cuales sería imposible comunicarse en nuestro idioma. El único detalle que se nos escapa es que no tenemos forma de explicar lo que es el tiempo.

Es algo hermoso de ver como un diccionario trata de explicarlo. Por ejemplo dice:

“Duración de las cosas sujetas a mudanza”.
“Parte de esa duración”.

Y sigue así unas tres páginas. Es una jerigonza, porque ¿hay algo que no esté sujeto a mudanza? Y por otra parte, ¿qué se entiende por duración?

El mismo diccionario nos dice:

“Acción y efecto de durar”.
“Tiempo en que algo se manifiesta sin interrupción”.

Hay una frase en latín que sirve para manifestar que no vale una definición que se muerde la cola, quiero decir, que no sólo no define, sino que insiste en explicar algo con una palabra que significa lo mismo. Se conoce como “petición de principio” y no tiene valor científico.

Por otra parte, todas las cosas están sujetas a mudanza. Quizás el cambio sea lo único permanente. De manera que una forma de divertirse puede ser leer las definiciones de Tiempo.

E. Kant (1724-1804) afirma que el Tiempo no existe, en lo que estoy casi de acuerdo.

El Tiempo es una convención social por razones de uso práctico. Es así como hemos aprovechado el movimiento de la Tierra alrededor del Sol y de sí misma para establecer el año y el día.

Estos patrones sirven para medir arbitrariamente los cambios que se producen en la interrelación de las cosas y compararlas con conceptos que damos por conocidos.

Kant quiere decir (así me lo imagino) que no existe un concepto de Tiempo en sentido absoluto e inmutable, algo así como una constante universal (como se entiende la velocidad de la luz), sino que cada cosa tiene su propio tiempo y éstos existirían en relación a la velocidad con que se producen los cambios de esa cosa.

El problema es muy difícil y de su comprensión dependerá en el futuro nuestra comprensión de nosotros mismos. En torno a este tema he pasado los mejores años de mi vida y todo el fruto que puedo ofrecer por tantas renuncias son las pocas líneas que siguen a estos párrafos y de cuya verdad ni aún hoy estoy seguro.

El Tiempo convencional de cualquier cosa se divide también de manera convencional en Pasado, Presente y Futuro. Daremos por sobrentendido que estamos hablando de lo mismo y que nos comprendemos perfectamente, porque si hemos de definir esas palabras el resultado será más divertido que definir el Tiempo.

Pues bien, estas son mis conclusiones:

El Pasado en sí mismo no existe. (En el mejor de los casos existió, pero ya no existe).

El Presente es la consecuencia del Pasado, o bien, el Pasado es la causa del Presente (en una interpretación de la causalidad occidental, lineal y continua).

El Futuro existe potencialmente en el Presente, o bien, el Presente contiene todos los Futuros posibles.

El Futuro no existe en sí mismo. Cuando exista (uno de los Futuros posibles) será Presente. ¿Es curioso, no?

Pero eso no es todo. ¿Existe el Presente? Me inclino a pensar que si, que existe en sí mismo. Lo que no puedo establecer es cuando empieza y cuando termina, o lo que es lo mismo, la duración del Presente. Si por durar entendemos la inmutabilidad, es decir la total ausencia de cambio, caemos en una paradoja muy difícil. Si nada cambia no tenemos referencia para establecer un Tiempo o una duración.

Evidentemente en un estado del TODO inmutable, da lo mismo un nanosegundo que muchos milenios. El Tiempo en un estado de inmutabilidad total no tiene sentido porque no transcurre.

Más bien tenemos que pensar que toda fotografía se refiere al Pasado. Quiero decir que cuando pensamos en el Presente estamos pensando en un Presente que ya pasó, aunque el acto de pensar tenga lugar en un Presente sobre el cual no hemos pensado aún, pero en el cual existimos.

¿Cuándo empieza el Presente?
¿En qué instante se diferencia del Pasado?
¿Cuándo comienza el Futuro?
O lo que es lo mismo ¿Cuánto dura el Presente?

Hay una estrecha relación (que corresponde estudiar a los físicos) entre Tiempo, Temperatura, Entropía y Espacio. Hay otros conceptos que también tienen inmediata relación con el tema: Cambio y Movimiento. El primero relativo a la transformación intrínseca y el segundo al desplazamiento relativo entre dos puntos. Todo ello, por supuesto, referido a la compleja relación Materia/Energía.

Aceptando la existencia de un Tiempo convencional para cada cosa (que bien puede ser una persona) podemos establecer un diagrama en forma de cono que nos muestra el Tiempo de esa cosa.

En la figura,

(A) representa a la persona o cosa en el punto Presente.
(P) es la representación gráfica del Pasado que ha sido la causa del Presente.
(Fp) es el cono de Futuros posibles. Es un cono de posibilidades binarias de elección para los seres humanos, especialmente en la Tierra. Para las cosas inanimadas es un cono de posibles situaciones futuras.
(Fa) es el espacio de los Futuros aleatorios, poco probables y difícilmente posibles, pero no son imposibles. Por ejemplo: Mañana comeré en París. Atendiendo a mis circunstancias actuales y a mi Pasado inmediato, y dado que no hay ningún proyecto de ir a París, es poco probable y difícilmente posible que lo haga realidad.
(Fi) son los Futuros imposibles. Podemos imaginarlos, pero no se realizarán, como si quisiera tener las orejas igual a Mickey Mouse.

En estos últimos razonamientos la importancia del Tiempo esta estrechamente ligada con la moral y la ética, entendidas como normas de conducta del individuo y de la sociedad.

Esencialmente en razón del concepto de DETERMINISMO y ALBEDRIO. En última instancia, en los casos más extremos, parece que siempre existe una posibilidad binaria de elección para el ser humano: ser o no ser. Pero esto es materia de otro tema.