Blogia
Máximo Kinast Avilés

LA DIGNIDAD: PATRICIA VERDUGO HA PARTIDO

LA DIGNIDAD: PATRICIA VERDUGO HA PARTIDO

 

Así partiste, digna.

Por Patricia Parga desde Bruselas
No osaría decir que éramos amigas, en el ancho sentido de la palabra. Sin embargo, en tanto colegas, compartíamos una sed no saciada por la dignidad, la justicia y la memoria. El último mensaje que recibí de tu parte fue para estimular mi trabajo de denuncia e investigación, hace sólo algunos meses...

Algunos te criticarán, como lo hacen siempre con los que nos debatimos a diario con el mal del investigador: la serendipia. Pero, cuando una persona muere, se dicen sólo cosas buenas de ella, y creo que sólo escucharé cosas buenas de ti porque tu aporte a nuestra memoria histórica es un legado innegable, para quienes el periodismo es y será una herramienta de justicia social.

Vengo de enviarle la triste noticia a Muntsa, de Catalunya. Recordé tu perrito juguetón, el vino rojo que bebimos en tu salón y el perfume de Jazmín que se colaba -desde el jardín- al interior tu casa en la Reina, en aquella noche memorable de verano hace ya más de ocho años.

Un vacío imposible de llenar en este competitivo pero solidario mundo periodístico. Nos harás falta, como a tu familia, tus hijos… vaya para ellos mi abrazo solidario y el compartir el orgullo de haberte conocido y la tristeza por tu partida.

Tocaya, desde dónde estés espero que puedas velar porque sigamos manteniendo la dignidad y la memoria.

http://pattyardillaparga.blogspot.com/2008/01/

la-dignidad-patricia-verdugo-ha-partido.html

=====================

 

MI ADHESIÓN: Estoy llorando a gritos, como un niño, con un dolor enorme porque ya no esta con nosotros Patricia Verdugo. Mal empieza este año si se lleva a gente tan hermosa, tan noble, tan valiente, tan inteligente, tan luchadora como Patricia Verdugo. El año pasado perdimos al poeta Sergio Mouat y al escritor Carlos Bongcam, grandes amigos y compañeros. Ambos víctimas del cáncer, nunca vencidos. Hasta sus últimos momentos estuvieron llenos de proyectos y de luchas por los Derechos Humanos. Ahora le ha tocado a Patricia y me duele y me ahogo con mis lagrimas por su partida. Nos quedan sus libros y la labor de difundirlos más aún, para que su ejemplo de vida perdure y sea imitado por las nuevas generaciones.

Mi respeto y mi dolor solidario a su familia.

Máximo Kinast Avilés

0 comentarios