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Máximo Kinast Avilés

TURISMO


2 de abril de 2001

En todos los sectores de Chile hay una clara conciencia de la belleza del país y acuerdo en potenciar el turismo... excepto en la burocracia policial que sigue creyendo que vive en plena dictadura militar.

Hace unos años, a inicios del Gobierno Frei, llegué al aeropuerto y luego de ser fumigado dentro del avión (no es una forma de hablar, es algo físico y real), llegué a Policía Internacional y presenté mi carnet de identidad chileno. El funcionario me exigió mi pasaporte.
Le dije que como chileno no necesito pasaporte para entrar en mi país, a no ser que Iquique se haya independizado, con lo cual sería extranjero. Me respondió que Iquique seguía siendo chileno y que yo debía presentar mi pasaporte. Insistí en que como español viajo por toda Europa con mi carnet español y nadie me pide el pasaporte. No hubo caso, ni alegando mis derechos constitucionales a moverme y residir en cualquier lugar de Chile, así es que le mostré el pasaporte.

Entonces me pidió "el papelito" que exigen a todos los que entran a Chile, en el que se declara a qué viene uno a Chile y cuánto tiempo piensa estar y le dije que yo no rellenaba ese formulario. Me dijo que lo exigía la Ley de Extranjería y le dije que me parecía bien si tenía ganas de molestar a los extranjeros, pero que esa ley me era inaplicable porque soy chileno. Me explicó seriamente que era para evitar el ingreso al país de delincuentes internacionales y me dio risa y me dijo que no me dejaba entrar y yo le dije que me quedaba afuera y me senté en el suelo a esperar.

Llegó otro funcionario, bastante amable, aunque algo tonto, que me dijo que el Presidente de la República rellenaba el papelito cuando regresaba al país y le respondí que los actos del Presidente eran respetables, pero no sentaban precedente jurídico, por lo que si a Su Excelencia se le ocurría defecar cada día a las diez de la mañana, ese acto no obligaba a los chilenos a hacerlo a la misma hora.

Pasé allí un par de horas, hasta que llegó un oficial de investigaciones (la policía civil), bastante inteligente, que me dijo que entrando a Chile podría tomar pisco sour, pero que allí, en tierra de nadie, no me lo podía ofrecer y se ofreció a apoyar mi reclamación, ya que consideraba que el papelito era una estupidez. De modo que escribí una denuncia o reclamación, él firmó el recibo y me dijo que me informaría de los resultados, con lo que abandonando mi actitud entré en Chile y hasta hoy no me ha informado.

Hace un par de semanas entré de nuevo a Chile y me hicieron pisar un polvo desinfectante, pero no me fumigaron. Eso sí, al salir del avión, alguien me sacó una foto con flash casi encima mío. Le dije que si era para la CIA que no se molestara, que ya la tienen. Ah, claro, tuve que rellenar el famoso papelito y entregarlo para entrar a mi país. Y mostrar el pasaporte chileno.

Supongo que Chile se llenará de turistas masoquistas, porque de los otros no creo que quieran venir a fumigarse y rellenar papelitos.

NOTA: Eso de "rellenar", en España se dice "cumplimentar".

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