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Máximo Kinast Avilés

BACHELET Y LA PLANTA DE CAMPICHE

Por A Fernando Herman


Mosciatti, en su entevista con CNN, habla del poder de las presiones que recibió Bachelet y su gobierno respecto a la Planta de Campiche, en circunstancias que debería hablar de su debilidad como Presidenta. Si uno adopta esta perspectiva, se abre la puerta a una pregunta que es crucial pues el solo pedido del embajador americano y su gobierno no tenían por qué ser suficientes para doblarle la mano a Bachelet.

La pregunta de fondo es ¿qué le ofrecieron a Bachelet?

Dado el contexto histórico de todo, la única respuesta posible es que le ofrecieron la Presidencia de ONU Mujer, la cual de repente le cayó del cielo. Sin más! De la noche a la mañana!

Los favores, si se hacen, siempre se pagan y ahí está ahora instalada en Nueva York con toda la parafernelia del caso, después de haber vendido a su propia patria, mientras desde el patio trasero de Chile la gente desinformada y que no piensa cómo pudo haber ocurrido tal milagro, la aplaude y admira! 

Así es como funcionan las redes del poder! Mucho más eficientes que "las redes de protección social"!

Por último, si se piensa bien, qué tiene Bachelet que no tiene cualquier mujer chilena con algo de formación política y que le permitió llegar a La Moneda? Nada! Absolutamente nada! Excepto la red de poder que la llevó a La Moneda. En el caso de ONU Mujer, lo mismo! Gracias a la vuelta de mano que le dio EE.UU.

No hay que ser brujo para atar cabos sueltos!

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