ESTÁN TODOS DE ACUERDO
Por Germán F. Westphal
En el fondo, los concertacionistas y los aliancistas están todos de acuerdo.
La última movida que ilustra esto y que de otra manera tendría graves consecuencias institucionales, resulta perfectamente normal y aceptable.
Me refiero al hecho que el Comandante en Jefe del Ejército ha nombrado recientemente como asesor nada menos que a su ex superior jerárquico, el PPD Francisco Vidal, ex Ministro de Defensa de Michelle Bachelet.
Conceptualmente, no debería ser aceptable que el Presidente de la República tenga de subordinado a un Comandante en Jefe del Ejército que es asesorado por un político de oposición o, en última instancia, de cualquier político, si tal Comandante en Jefe efectivamente adhiere al principio de prescindencia política.
La cuestión es muy grave desde el punto de vista institucional, un asunto de Estado altamente preocupante por el precedente que establece.
Para poner la gravedad de tal nombramiento en perspectiva, basta considerar la situación hipotética de que durante la Presidencia de Salvador Allende, un Jefe de cualquiera de las ramas de las FF.AA. hubiera nombrado como asesor al golpista Juan de Dios Carmona, ex Ministro de Defensa de Eduardo Frei Montalva...
Técnicamente, el actual Comandante en Jefe del Ejército ha dado un "golpe blanco" y violentado el principio de subordinación al poder constituido y de prescindencia política que debe mantener.
Sin embargo en los hechos no ha violentado nada pues están todos de acuerdo.
Visto de esta esta perspectiva, el entramado que se ha montado con el PPD Francisco Vidal como Asesor del Comandante en Jefe del Ejército, el General Oscar Izurieta como Subsecretario de Defensa y el ex DC Jaime Ravinet como Ministro del ramo, resulta en extremo interesante pues establece canales de comunicación y acuerdo entre gobierno y oposición al más alto nivel político-militar posible.
Conceptualmente, no debería ser aceptable que el Presidente de la República tenga de subordinado a un Comandante en Jefe del Ejército que es asesorado por un político de oposición o, en última instancia, de cualquier político, si tal Comandante en Jefe efectivamente adhiere al principio de prescindencia política.
La cuestión es muy grave desde el punto de vista institucional, un asunto de Estado altamente preocupante por el precedente que establece.
Para poner la gravedad de tal nombramiento en perspectiva, basta considerar la situación hipotética de que durante la Presidencia de Salvador Allende, un Jefe de cualquiera de las ramas de las FF.AA. hubiera nombrado como asesor al golpista Juan de Dios Carmona, ex Ministro de Defensa de Eduardo Frei Montalva...
Técnicamente, el actual Comandante en Jefe del Ejército ha dado un "golpe blanco" y violentado el principio de subordinación al poder constituido y de prescindencia política que debe mantener.
Sin embargo en los hechos no ha violentado nada pues están todos de acuerdo.
Visto de esta esta perspectiva, el entramado que se ha montado con el PPD Francisco Vidal como Asesor del Comandante en Jefe del Ejército, el General Oscar Izurieta como Subsecretario de Defensa y el ex DC Jaime Ravinet como Ministro del ramo, resulta en extremo interesante pues establece canales de comunicación y acuerdo entre gobierno y oposición al más alto nivel político-militar posible.
El doloroso desastre del terremoto y tsunami justifica todo, tal como Oscar Izurieta justificó su nombramiento como Subsecretario de Defensa, pero también queda claro que el aparataje así montado puede resultar muy eficiente en situaciones de conflicto social como el que el Estado de Chile mantiene con el pueblo mapuche y otros que puedan eventualmente surgir.
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