ORIGEN DEL PRIMERO DE MAYO
Fuente: El Trabajo Nº 238 Diario Virtual del PT de Chile
¿Porque los trabajadores de todo el mundo conmemoramos cada año el primero de mayo?
La historia se remonta al 1° de mayo de 1886 cuando la principal central de trabajadores de Norteamérica, la Federación Americana del Trabajo, convocó a realizar una huelga general por las ocho horas de trabajo bajo la consigna:
"A partir de hoy, ningún trabajador debe trabajar mas de ocho horas por día. ¡Ocho horas de trabajo! ¡Ocho horas de reposo! ¡Ocho horas de recreación!”
El primero de mayo de 1886 en los Estados Unidos cientos de miles de trabajadores adhirieron a la huelga y se comenzó a establecer la limitación de la jornada de trabajo.
Esta es una lucha histórica por la liberación de la humanidad. En aquella época era "normal" la jornada diaria de 12 a 14 horas diarias por seis días a la semana, con sueldos insuficientes y condiciones precarias de trabajo.
La lucha por la ocho horas de trabajo no fue fácil. Costó sangre y lágrimas de los obreros de la época.
En la ciudad de Chicago, el día 3 de mayo de 1886, la policía y rompehuelgas financiados por los empresarios, provocaron a los manifestantes, asesinaron a seis obreros e hirieron a 50 trabajadores. Los trabajadores en respuesta convocaron a una nueva manifestación para el día 4 de mayo en la plaza Haymarket de Chicago.
Ese día en plena concentración estalló una bomba que dejó como saldo un policía y varios obreros muertos e innumerables heridos. Se decretó el estado de sitio y comenzó una feroz persecución hacia los dirigentes sindicales.
LOS MARTIRES DE CHICAGO
Ocho dirigentes obreros, todos de ideas socialistas, fueron detenidos y juzgados. Se les acuso de arrojar la bomba que mato a policías y manifestantes. Los hechos eran falsos pero cuatro de ellos fueron condenados a la horca y ejecutados.
Se trata de los compañeros:
Albert Parsons, norteamericano, 38 años, periodista
Georges Engel, alemán, 50 años tipógrafo y periodista
Auguste Spies, alemán, 31 años, periodista
Adolf Fisher, alemán, 30 años, periodista.
Mientras Louis Lingg, carpintero de 22 años, se suicido en prisión. Samuel Fielden, obrero textil y pastor metodista fue condenado a presidio perpetuo y Oscar Neebe a 15 años de cárcel.
Ellos son los Mártires de Chicago, los Héroes de la clase trabajadora de todo el mundo.
LA VERDAD TARDIA
Seis años después de la ejecución de los compañeros se revisó el proceso y se estableció que el juicio había sido una farsa; se otorgó el perdón absoluto a los dos compañeros que permanecían en prisión pero para los demás fue demasiado tarde.
Los trabajadores de todo el mundo rinden homenaje a sus mártires año a año y vuelven a levantar la bandera inmortal de los derechos de los trabajadores. Los avances tecnológicos permitirían a la humanidad trabajar durantes 4 horas satisfaciendo ampliamente sus necesidades.
Una jornada breve de trabajo permitiría disfrutar el tiempo libre en educación, deporte, arte, cultura y relaciones verdaderamente humanas. Pero lamentablemente dichos avances son utilizados para enriquecer a una minoría social a costa de la explotación de las grandes mayorías. Esta situación debe cambiar, de nosotros depende.
Compañero, ¿conocía usted este fragmento de la historia de nuestras luchas?
¿Sabia usted que hoy en Chile, existen jornadas de trabajo de 12 horas diarias y más, con sueldos bajísimos y precarias condiciones en el lugar de trabajo?
Lea, reflexione y luche porque los empresarios imponen estas conductas a los trabajadores.
La lógica patronal es simple, menores sueldos, mayor productividad y eficiencia, redundan en mayores utilidades y rentabilidad para ellos, en desmedro de los intereses de nosotros los trabajadores.
De muestra algunos botones:
La extensa jornada a la que se somete a la fuerza de venta, sin horario, y de lunes a sábado, sin metas conocidas oportunamente, etc.
En las plantas de producción, nuestros compañeros, se ven en la necesidad de trabajar hasta 12 horas continuas, por unas lucas más, a veces por medidas tomadas erróneamente al terminar con una línea de producción, y así suma y sigue si nos detenemos a reflexionar y analizar concienzudamente.
Para terminar queridos compañeros, Hoy como ayer,
¡Viva el Día Internacional de los Trabajadores, viva el 1° de Mayo!
Un fuerte abrazo a cada uno de ustedes y familia.
MARIO OLIVARES RIOS
(Pdte. Sindicato N°2, Viña San Pedro Tarapacá)
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David Valencia -