EL MITO DE PAULO FREIRE
Para entender el rol de Paulo Freire
Por Profesor Jota
La formación teórico ideológica de Paulo Freire presenta un tronco común con partidos de izquierda cristiana, reconociendo él que algunos de los principales teóricos que influyeron en sus propuestas son Jacques Maritain y Emmanuel Mounier. El primero de estos autores es el sistematizador de la teoría del humanismo cristiano, considerada eje, por ejemplo de la Democracia Cristiana chilena y, dicho sea de paso, poco acogido en las filas de la teología de la liberación. El segundo, Mounier, es el autor de las tesis del individualismo cristiano, faceta de los sectores más ideológicos de las corrientes cristianas llamadas progresistas, entre otras nuevamente la DC chilena. Su libro El Personalismo es un canto camuflado a la distinción entre individuos. No es casualidad que el arzobispado de Valparaíso haya escogido estos dos autores para servir de viga maestra para la educación de los estudiantes de la Universidad Católica del Puerto desde la década de los sesenta.
En esa época Freire es invitado por el gobierno de Eduardo Frei a ocupar un alto puesto en el ministerio de educación para auxiliar al programa de la Revolución en Libertad, modelo adscrito a las necesidades del capital en la época que aspiraba a transformarse en muro de contención al desarrollo de la rebeldía social que recorría el continente después de la revolución cubana.
Allí Freire tuvo una notable contribución a la maduración de un sector de la Juventud Demócrata Cristiana, llamado los chascones, que salen del partido y constituyen el Movimiento de Acción Popular Unitaria MAPU, que se incorporó a la unidad popular y de donde provienen los Principales cuadros que se incorporar al Partido Socialista y constituyen uno de los más importantes pilares del gobierno empresarial de la Concertación, entre ellos Insulza, Viera Gallo y muchos otros. Este sector se caracterizaba y se caracteriza actualmente del punto de vista filosófico y sociológico por una notable influencia de la racionalidad instrumental weberiana, así como kantiana y también de Jurgen Habermas, autor que complementa las posturas de Freire, en especial por medio de la teoría de la Acción Comunicativa.
No es casual que hoy día en Chile los principales incentivadores de Freire se encuentren en las filas de partidos políticos, en especial, la propia DC, sectores del Partido Humanista, La Surda y algunos sectores de la actual Izquierda Cristiana. Las universidades católicas de Chile y de otros países lo continúan utilizando con profusión. Las instituciones como ONGs y Fundaciones lo prefieren antes que otros autores. La jerarquía de las iglesias prefiere este autor antes que a los actuales teólogos de la liberación como Boff y Gutiérrez.
En la actualidad el Vaticano ha lanzado una ofensiva para recuperar terreno debido al fuerte desarrollo de la autonomía social y de las ideas propias de las comunidades y localidades, en especial en nuestro continente. No sólo se ha lanzado en picada contra la teología de la liberación, sino que afirma en Brasil que la iglesia católica ha purificado a los indígenas y que el resurgimiento de sus religiones sería un paso atrás, que los indígenas le dieron la bienvenida a los sacerdotes que llegaban con los invasores. De más está decir que esta noticia aparecida en la prensa el día de hoy, martes 15, trajo como consecuencia fuertes reacciones y críticas de dirigentes indígenas de Brasil. No es casualidad que hace poco tiempo la CIA haya declarado que las luchas indígenas son un peligro para la estabilidad del continente (la de ellos será).
El PT brasileño utilizó en su época la teoría de Paulo Freire más que todos los demás partidos, Es muy extraño que al igual que el MAPU chileno, haya luego hecho su opción por el neoliberalismo. Lula, un ejemplo de gobierno de izquierdas para el capital, muy semejante a la Concertación chilena, siempre ha apoyado y estimulado el estudio de Paulo Freire.
En Iquique en unas jornadas antropológicas, una señora, militante de la teoría Paulo Freire, afirma que es necesario que los aymaras asuman el humanismo, hay que humanizarlos. Pero eso no es posible, el humanismo occidental es una manera de mirar las cosas y que ellos tienen otra cosmovisión.
Queda claro que los sacerdotes que llegaron con los invasores y los actuales pedagogos humanistas seguidores de Maritain y de Mounier, no presentan mucha diferencia en las intenciones de introducir elementos valóricos y conceptuales dentro de la gente.
Freire afirma que no se puede ser neutro en la educación popular, es decir, hay que tener una ideología previa. La pregunta es que si la gente va a asumir su propio pensamiento, para qué necesitamos nosotros estar modelados de una muy específica manera de pensar.
Para la época del estatismo, es decir del welfare state, el capitalismo de estado, el dirigismo ideológico, etc. Paulo Freire fue muy importante para las izquierdas, ya que permite la concientización, es decir, el desarrollo de un pensamiento liberador en cada persona.
Hoy día, ante las crisis estatales, de hegemonía, de ideologías, paradigmas, éticas, etc. y la emergencia de sujetos sociales con pensamiento propio, la incorporación de la población en los estados e instituciones es una tarea primordial para el capital, con la finalidad de evitar que la población se autoorganice de maneras alternativas desarrollando otra sociedad desde abajo.
No importa el tipo de sociedad que la gente se plantee, pero para quien ya tiene un diseño de cómo debería ser, esa aseveración resulta contraproducente, pues la idea es que la gente de la población "se plantee" un tipo de sociedad, sus características, en fin, tal como la señora "humanista" quería insuflar esa mentalidad a las comunidades aymaras.
Freire se caracteriza por una racionalidad adecuada a la época de disputa del poder. Hoy esa disputa no está en primer orden para mucha gente y parte importante de la población. En Chile casi la mitad de los con derecho a voto o no se inscriben, o no asisten a la gesta electoral, o votan nulo o blanco y unos pocos votan a la izquierda. Es interesante constatar que la votación de la Concertación y de la Alianza corresponde casi exactamente a la mitad de los que tienen edad de votar.
Obviamente si se forma parte de una entidad que desea que la gente vaya a votar, se va a partir de la base de que algo anda mal y así se estará imponiendo un criterio, aunque se diga que hay libertad de escoger a quien quieran. Con esto no se quiere decir que se esté a favor o en contra del voto, simplemente estamos haciendo abstracción, pero ¿pueden todos los educadores populares hacer esa abstracción? Freire no quiere la neutralidad, ya que según él todo educador popular debe tener una ideología de liberación, cuyas características están diseñadas en diferentes partes de sus escritos. ¿Alguien conoce a algún seguidor de Freire que sea abstencionista? Freire cree en un camino más o menos establecido para dicha liberación, que es la humanización, es decir que opresores y oprimidos dejen de andar como el perro y el gato. Recordamos que Lula habla de su gobierno de humanización del capitalismo.
Si los métodos de Paulo Freire no funcionan con las comunidades originarias es porque allí no es posible la concientización, puesto que ellos tienen una cosmovisión que no acepta el humanismo de Maritain ni el personalismo de Mounier.
Freire es un educador de la época del individuo ciudadano, es decir una persona separada de las otras y unidas por vía de las instituciones. Freire es un educador de base religiosa, es decir de un tipo de amor que antes de dirigirse hacia las personas como el buen samaritano, debe primero asentarse en una relación directa con dios. Freire es un educador ideológico, es decir que prioriza por la concientización, es decir el conocimiento y la comprensión de las cosas, después viene el cambio. Un racionalista.
Freire no es un educador para las comunidades, ya que éstas no necesitan la intervención de educadores. Freire es un educador de personas que mantienen y acentúan su individualidad frente a los demás, evitando la formación de los sujetos "nosotros", más bien manteniendo espacios de convivencia, respeto y acuerdo sin llegar a niveles mayores de aproximación o simbiosis. Por eso Freire no trabaja con conceptos como "confianza", "afecto", "espiritualidad", "amor", "cuerpo a cuerpo".
Para Freire el cruzamiento es de ideas, para el desarrollo de la conciencia que llevará a la gente a determinar un camino. Dicho camino no está en la aproximación a las personas que tiene a su lado, sino que está por fuera de esos momentos y lugares, Los zapatistas dicen que hay que partir de los corazones, Freire dice que hay que partir de la conciencia, es decir, de la racionalidad. El irracionalismo de los afectos y del mundo de la vida no tiene cabida en la práctica de los seguidores actuales de un Freire adecuado a épocas idas. Para Freire hay que "visualizar" la utopía, es decir, configurarla mentalmente, lo que no es más que un preconcepto kantiano o una instrumentalización de la racionalidad, con lo que se cae en el viejo iluminismo de la época de transición del medioevo al pensamiento liberal.
Esperamos que estas breves notas muestren la distancia existente entre la pedagogía y la antipedagogía, es decir, la ausencia total del educador. Estos talleres se basan en la teoría del maestro ignorante, es decir, no se trata de alcanzar un nivel de conciencia, no se trata de llegar a alguna parte predefinida, sino de encontrar puntos de partida, donde el educador deja de serlo, abandona su bagaje de iluminado, por más palabras diferentes que le ponga para parecer menos doloroso que ser considerado iluminado, y se acerca al plano de la igualdad, al plano de la inteligencia. No es un intercambio de saberes o de posturas como dice Freire en su acción dialógica donde el que enseña sabe que le falta algo y el que aprende sabe que tiene algo para entregar, sino un intercambio de afectos, sensaciones y búsquedas que configuran un sujeto cognitivo diferente. En el plano de la igualdad de las inteligencias y de las sensaciones la idea es desprenderse de los saberes individuales para juntarlos amorosamente en la construcción de un saber otro. Los saberes se acumulan en el plano conciente, la racionalidad y es justamente allí donde circulan las lógicas que invitan a actuar de determinadas maneras.
El rupturismo de la educación popular pasa por zafarse de esos lazos que introducen el elemento dialógico proveniente de la cultura oficial sutilmente en el seno del proceso de reconstrucción del carácter gregario comunitario del ser social, para descubrir entre la gente elementos y métodos de autoeducación que no se transformen en poleas de transmisión de la cultura sistémica o liberadora o cualquiera que sea. Esa sería una forma de liberación, librarse de los educadores. Los métodos de trabajo que desarrollamos en los talleres apuntan a eso.
Los interesados están invitados a participar en el Taller de Educación Popular de los Talleres Transhumantes de la Universidad Libre de la V Región, los jueves a las 18:00hrs. en la sede de la Confederación Nacional de Pescadores Artesanales de Chile, Conapach, calle Montealegre 398, cerro Alegre. Este jueves los esperamos desde las 17:30hrs. para realizar las inscripciones a los nuevos incorporados. Con esto se cierran las inscripciones.
Saludos libertarios
ULibre 5ta.
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