FALLECIÓ JOHN KENNETH GALBRAITH

HOMENAJE POSTUMO AL ILUSTRE ECONOMISTA

No debiera sorprender la muerte de un hombre de 97 años. A esa edad, si no se ha hecho antes, es normal morir. ¿Por qué entonces me sorprende y me duele?

Pocos hombres ha dado el siglo pasado tan integros, tan inteligentes y tan honestos como Galbraith.

Su estilo claro y ameno hacía fácil temas complejos. Siempre al lado de la Justicia, de la Equidad, de los más necesitados. Estuvo en los puestos más altos de las administraciones demócratas desde Roosvelt a Clinton. Embajador de los USA en la India durante el gobierno de Kennedy. Nunca dejó de ser el alto, degarbado y afectuoso profesor de Harvard y de Princeton. 

Sus obras más conocidas son un llamado a la cordura, como  La sociedad opulenta, editado en 1958, La era de la incertidumbre, El crac del 29 y La cultura de la satisfacción; pero son sus cuentos cortos, los menos conocidos, los que nos muestran un personaje comprometido, inteligente hasta el exceso, lleno de fina ironía y un crítico implacable del sistema que hoy conocemos como neoliberal.

Deseo que la muerte no traiga el olvido. Deseo que sus libros vuelvan a editarse una y otra vez. Deseo que su palabra inteligente llegue a las juventudes de todo el mundo. Deseo que viva intensamente en los pueblos en la hora de su muerte y por siempre.

Maximo Kinast