SOLUCIÓN A LA CRISIS MUNDIAL (3)

DONDE INTENTARÉ TERMINAR DE EXPLICAR

LO QUE ESTA OCURRIENDO, PORQUE YA VA

SIENDO HORA DE EXPLICAR LAS CAUSAS

PROFUNDAS DE LA CRISIS MUNDIAL

Esta desagradable y peligrosa crisis financiera mundial tiene como causa inmediata la estupidez o viveza neoliberal. Hay causas más profundas, que será necesario explicar y comprender para entender y aplicar las soluciones, pero el horno no está para bollos y hay que ir paso a paso o nos perderemos en este embrollo. Vamos, pues, con el ’cuento chino’ (como llaman en Chile a las mentiras), que inventó un japonés y que ustedes se saben muy bien.

Nos vendieron la pomada del ’fin de la Historia’, de ’la copa que rebalsa’, de que el Estado es mal administrador, del fracaso del comunismo (con la caída del muro), de que se acabaría la pobreza y todos viviríamos en Jauja, en un mundo feliz.

Todo más falso que Judas. Todavía hay personas que creen -o dicen creer- que faltó más liberalismo. Que no se aplicaron bien las ideas y principios neoliberales. Se equivocan. Las ideologías no tienen relación con los hechos. Los hechos dependen de la aplicación que hagan los seres humanos. Así, por ejemplo, es un axioma marxista decir que los bienes de producción han de estar en manos del pueblo y no de los particulares. Suena lógico y estoy dispuesto a firmar a favor de ese principio... pero cuando hablamos de que están en las manos del pueblo ¿de qué estamos hablando? En la práctica, los bienes de producción están en las manos del Partido y el Partido está en las manos del Secretario General. Para todos los efectos prácticos es como si estuviesen en las manos de cualquier millonario. El comunismo, como idea, no fracasó. Fracasó la aplicación práctica que hiceron los jerarcas del Partido.

Con el neoliberalismo ocurre algo semejante. Se supone, se da por sentado, de que los empresarios son mejores administradores que el Estado. Premisa falsa. Treinta años de consultor de empresas en Barcelona, me han permitido conocer empresarios capacitados, honestos e inteligentes, pero muchos más son los que he conocido que no cumplían uno o ninguno de esos tres requisitos indispensables para administrar bien una empresa. La gran mayoría de empresarios, sobre todo chilenos y norteamericanos, están por el beneficio como sea. Hay emprersarios que buscan ganar dinero a cambio de satisfacer las necesidades de sus clientes, pero suelen ser pequeños o medianos empresarios. Los grandes y las transnacionales sólo van a la búsqueda y captura del dinero de los clientes. Incluso hay muchos pequeños que también están en esa onda del ’pelotazo’ del dinero fácil.

Así es como lo poco de serio o de bueno que pudiese tener la ideología neoliberal se pervierte en busca del beneficio fácil. Como en el Estado es posible que haya más control y hasta algo de transparencia, es fácil que el Estado sea un mejor administrador que Los Piratas, Los Pirañas o Los Bin Laden o que El Padrino.

Y así han pervertido todo. Vivimos en una Plutocracia mundial, a la que le damos el nombre de Democracia... `porque votamos de vez en cuando, después de haber sido sometidos a un exhaustivo lavado de cerebro con el marketing político. Dicen que respetan la libertad de prensa, pero sólo de su prensa. En Chile, por ejemplo, el Gobierno ha hecho todo lo posible y lo imposible para no devolver El Clarín a sus legítimos dueños, además de dar su publicidad a un duopolio, con exclusión de todos los demás medios de comunicación.

Así ha sido. Los neoliberales mintiendo, tergiversando la realidad, han abusado de los pueblos y de la naturaleza. Ayudados por leyes tan antiguas que no guardan relación con el mundo actual. Amparados en cuentos y mentiras, repetidos como axiomas, han destruido la naturaleza; han fabricado dinero -físico y virtual- absolutamente innecesario, con lo que la inflación mundial sera colosal; han agotado los recursos sin cuidarse de reponerlos; han modificado el clima, que seguirá cambiando por inercia; nos han lavado el cerebro y cada día nos idiotizan con la TV; han creado organismos internacionales para ayudarles a robar, expoliar o privatizar (como les gusta a ellos decirlo); han corrompido la Justicia, incluyendo la Corte Suprema en muchos países como USA, Chile, España y un montón más; han usado los bancos para fabricar dinero -sin respaldo. y para estafar a sus clientes; han transformado algo tan noble como la Seguridad Social en un negocio de las AFPs y similares; han transformado las compañías de seguros y muchas empresas en organizaciones mafiosas; han transformado la educación en un negocio, sin importar la calidad: han usado la salud como un medio para privar al trabajador de parte de su dinero a cambio de nada...

Y gracias a ellos, que han tratado el planeta como una fuente inagotable de recusos, tenemos y tendremos lluvias ácidas, huracanes y tornados, subida del nivel del mar, deshielo, agotamiento de las reservas de agua; agotamiento de los productores de aire, por tala innecesaria e irresponsable de bosques y selvas; trastornos genéticos por alimentarnos con transgénicos; pérdida de la biodiversidad por causa de los transgénicos; agujeros en la atmósfera con radiaciones peligrosas y cáncer de piel; hambre, hambrunas, millones de personas mueren de hambre cada año, entre ellos unos treinta millones de niños...

¿Quiénes son ellos? Son personas con apariencia humana, unos cien mil en toda la Tierra son los que tienen Poder (los demás son lacayos), que viven sólo para hacer beneficio, aunque sean beneficios virtuales en un mundo futuro que nunca llegará. Sabemos sus nombres. Son neoliberales. Son los más ricos de este planeta. Son los grandes empresarios. Son los políticos, los banqueros, los financieros, los ideólogos de esa nueva religión que está muriendo y que se llama neoliberalismo. Son los mismos de siempre, los mismos a los que acudirá a rescatar el Gobierno de USA, que se rescatará a si mismo, porque el dinero que han pedido al Congreso es principalmente  para ellos mismos.

¿Vamos comprendiendo la situación?

Mañana seguiré con las causas profundas, para terminar hablando de las ’soluciones’.