EDUARDO FREI: 'CHILE NECESITA UNA NUEVA CONSTITUCIÓN'
A CONFESIÓN DE PARTE
RELEVO DE PRUEBAS
NOTA DE MAXIMO KINAST: Mis comentarios van en rojo. El discurso del defensor del asesino de su propio padre y actual Presidente del Senado de Chile va en color negro.
La política chilena debe recuperar su prestigio y credibilidad con más participación y nuevas energías e ideas
Por Eduardo Frei Ruiz-Tagle, Presidente del Senado (e incondicional defensor del asesino de su propio padre)
El viaje que hice esta semana a Italia, accediendo a una invitación de la Presidenta de la República, Michelle Bachelet, para que la acompañara en su visita de Estado a ese país y al Vaticano, me permitió ver de cerca los distintos acontecimientos políticos que se están viviendo en Europa.
Pero Grullo no podría haber dicho una perogrullada mayor.
Principalmente, en Roma aún es motivo de comentarios la aplastante victoria –con el 74,6 por ciento de los votos- del actual alcalde de esa ciudad, Walter Veltroni, en las primarias del Partido Demócrata, que actualmente ostenta el poder en Italia. En estos comicios participaron alrededor de 3 y medio millones de personas, pese a que se trataba de una elección de carácter interna.
No me salen los números, porque en Roma sólo hay
Población: 2.823.723 2004
Según http://es.wikipedia.org/wiki/Roma
Pero, bueno, por un millón de votos de diferencia no voy a discutir.
Este sólo hecho nos deja importantes enseñanzas para nuestra propia realidad, especialmente para el sistema de partidos políticos que impera en Chile. En primer lugar, refleja la necesidad de promover la participación de la ciudadanía en los asuntos públicos.
Esto es verdad, pero dicho por Frei es una sinvergüenzura. Seamos claros ¿Por qué no lo dijo cuando fue Presidente? ¿Quién, sino la Concertación, es culpable de mantener ausentes a los ciudadanos de los asuntos públicos? ¿Por qué cuando fue Presidente no le dio el derecho a voto a los chilenos que residen en el extranjero?
Al respecto, nosotros en vez de evolucionar estamos retrocediendo. Es cosa de ver la forma en que nuestros partidos eligen a sus candidatos a cargos de representación popular. Generalmente, estas decisiones se adoptan entre cuatro paredes por un círculo cerrado de personas, con lo cual lo único que conseguimos es reducir aún más nuestro electorado.
Esto es una verdad absoluta, y a confesión de parte, relevo de pruebas. Más aún si el que confiesa es uno de los hechores del desaguisado. En España a esta clase de gente se le llama caradura.
Por eso reitero el llamado que hice hace algunos días en el Congreso Ideológico de la Democracia Cristiana: uno de los grandes desafíos que tenemos por delante es reivindicar la política democrática, que es la piedra angular de nuestra construcción de futuro.
Claro que sí. En Chile no hay democracia desde el 11 de septiembre de 1973. Y si no ha habido en los últimos 17 años es porque a los inverecundos políticos de la Concertación le convenían las leyes -en fondo y forma- de la Dictadura. Como ahora se les está acabando el negocio, se empiezan a volver democráticos. En el fondo, lo que hay detrás de estas declaraciones no es un deseo sincero de rectificar, sino lo que quiere este desvergonzado es volver a ser Presidente de Chile para seguir activando sus negocios en el puerto de Mejillones.
Precisamente, el rol que hoy están cumpliendo los partidos es una de las principales fuentes del desprestigio que afecta a la actividad política. La ciudadanía los ve como organizaciones manejadas por un círculo reducido de personas que está más preocupado por sus intereses corporativos y no por el país; como un grupo desconectado de las preocupaciones de la ciudadanía; y como entidades afectadas por prácticas dañinas como el cuoteo político y la corrupción.
El desprestigio empezó con los Pactos Secretos para hacer la transición. El desprestigio se lo ganaron por engañar al pueblo, por no juzgar ni condenar al Innombrable, por bajarse los pantalones ante los uniformados, por usar la investidura para chupar del bote. Y se equivoca en la forma que los ve la ciudadanía. No los ve como 'como un círculo reducido de personas que está más preocupado por sus intereses corporativos y no por el país'. No, señor Frei, ahí se equivoca. La ciudadanía los ve como una banda de mafiosos, privatizadores (que es sinónimo de ladrones) y como destructores de glaciares y genocidas del pueblo mapuche y encubridores de los nombres de los torturadores. Ustedes son un peligro para Chile.
Bajo este panorama, nadie se puede extrañar de que los chilenos se sientan lejanos a la política y que predomine en ellos la apatía e indiferencia, o que los jóvenes ni siquiera se inscriban en los registros electorales y que un número significativo de los que están inscritos no concurran a votar.
¡Eso! Eso es lo que pasa, y de gracias a su buena suerte que la reacción sea de apatía y no de rabia.
Prestigiar la política es esencial para el desarrollo de nuestro país y para el futuro de la democracia, pero para lograrlo es esencial de dotarnos de instrumentos que favorezcan la participación de la gente. Y por ello, pienso que debemos darle una nueva Constitución Política a Chile.
Exacto, hay que dar una Nueva Constitución a Chile. En eso estamos de acuerdo. ¿Por qué la maquillaron y no hicieron una nueva, con el inverecundo Ricardo Lagos? Me temo que usted piensa a lo Gato Pardo: 'Para que todo siga igual, todo debe de cambiar'
Si realmente le interesa Chile, si quiere a su país, váyase a su casa y deje paso a nuevas generaciones, que ustedes están quemados por sinvergüenzas. ¿Me ha comprendido la indirecta? Se la mandé suavecita.
El país necesita una Constitución democrática, con confianza en la libertad humana y sin miedo a la política. La ciudadanía aspira a que el país tenga un sistema político abierto y no limitado a un grupo de privilegiados, inclusivo y no excluyentes, que incentive la participación en vez de la indiferencia, y que exprese fielmente la soberanía popular.
Imposible estar más de acuerdo con lo que usted dice. Ahora haga algo consecuente con lo que dice: ¡¡VÁYASE A SU CASA!!
Por el contrario, hoy tenemos una Constitución heredada de la dictadura que es una camisa de fuerza para nuestra pretensión de tener una democracia amplia y plena. La hemos reformado una y otra vez, pero seamos claros la eliminación de los enclaves autoritarios no soluciona el problema ni tampoco la valida ante la ciudadanía.
¡Qué güeno que cachó la onda! ¡Al fin le cayó la teja! Pero, oiga Usted, Mr Frei ¿Me va a decir que esto no lo sabia cuando fue Presidente? Todos sabemos que usted es el hijo tonto de Don Eduardo, tonto, pero no tanto, digo yo. Pa mi que usted sabía lo que tenía que hacer cuando fue Presidente y no lo hizo de puro inverecundo que es.
Eso, no tenga miedo a los que estamos cabreados con ustedes. Responda, atrévase, le doy espacio en mi blog (que vale tanto o tan poco como el portal del Ejército de Chile). O escriba a El Clarin, si se atreve. Si quiere que la gente participe, ¿Por qué no le devolvió El Clarin a sus legítimos dueños? ¿Por qué su gobierno no invirtió en publicidad en Rocinante? ¿Por qué dejó que se muriera el 7+7 si era de democristianos? ¿Desde cuando le ha venido entusiasmo por 'una democracia en serio'? Mire que le gustó harto ser Presidente de una Democracia chuecha, recortada ¿o se dice tutelada?.
La madre del cordero es que usted se quiere repetir el plato, aunque deba fungir de demócrata, como hizo el Innombrable (se convirtió por unos días en el Abuelito de Heide y posó de demócrata para el plebiscito). No me extrañaría que usted siga los pasos de su defendido.
CONCLUSIÓN: A veces hasta los más malvados e inverecundos pueden decir cosas buenas; pero lo que vale para conocerlos son sus obras. Las que hicieron y las que no hicieron pudiendo hacerlas. Palabra de Dios en boca de un ateo. Cristo fue el de la idea de que los árboles se conocen por sus frutos.
3 comentarios
rodrigo diaz yubero -
Gracias por la ironía que desenmascara la necedad de ciertas argumentaciones de última hora.
Me declaro un des-concertado por tus razones y por otras.
Creo que estamos ad portas de vivir un proceso interesantedesde un punto de vista político. (Puedo explicarlo a futuro)
Por ahora, un gusto de haberte leído y sigo siendo un convencido de la necesidad de unidad y organización.
Tal vez un nuevo referente con vocación de poder.
Saludos des-concertados
Maximo Kinast -
1º Manuel Rodríguez, aunque gobernó por un solo día.
2º Manuel Balmaceda
3º Pedro Aguirre Cerda, y
4º El Compañero Presidente, Dr. Salvador Allende.
Cordialmente
Maximo
Cecilia -
Nada que ver pero ando tratando de verificar una informacion que dice que B. Ohiggins se gastó parte del emprestito pedido a Londres (expedicion libertadora del Peru) en una casa para su mama ¿Sabes algo de esto? Agradecería mucho tu informacion