LAS MUJERES CONTRA EL RACISMO FASCISTA DE LOS PREFECTOS

Amigos (as) de las Listas:

Los cívicos, prefectos, empresarios y otros sectores opositores del gobierno, deben comprender que el asalto y saqueo de instituciones estatales, el genocidio, el bloqueo despiadado, el cierre de válvulas de los ductos de petróleo, la destrucción de documentos y la quema pública de bibliotecas, no son armas en la lucha democrática.

Tienen sus senadores y diputados, y es en la instancia del Congreso Nacional donde deben plantear el debate. Le temen la consulta al soberano, que se manifiesta pacíficamente en las urnas, y por eso generan violencia, desatan odio racial, muerte, asesinato.

Estos sectores que temen perder sus ancestrales privilegios de clase, buscan con afán un golpe de Estado cívico prefectural, hecho que la comunidad internacional ha alertado a tiempo de expresar su solidaridad con el gobierno electo por el 54% del voto ciudadano y reafirmado en el último referendo revocatorio de mandato con el 64% de apoyo militante al proceso de cambio en el que avanza Bolivia.

Hoy pasan a las amenazas y amedrentamiento personalizado, tratando de acallar las voces de protesta.

Tenemos el deber moral de respaldar a nuestra compañera Rosario Vargas y a todos cuantos son perseguidos por sus ideas. El trabajo de denuncia que realizan estas compañeras en general y Charo Vargas en particular, merece nuestro profundo respeto por que es un ejemplo del rol del (a) trabajador (a) de archivos, bibliotecas y otras unidades de información,q ue no puede estar ajeno a la coyuntura política, social o económica de un país, una ciudad o un Departamento (provincia, estado).

En razón de lo expuesto, amigos (as) de las Listas, expreso por este medio mi solidaridad y apoyo moral a nuestras valientes compañeras de Santa Cruz y otros departamentos donde impera la violencia e intolerancia contra el indígena.

Atentamente,

Luis Oporto Ordóñez

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